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Los 5 mejores QBs disponibles en el Draft

Como alguien que lleva años siguiendo el College Football, la del quarterback es la posición más difícil de pronosticar. La cantidad de información que se quedan los equipos es abrumadora y es mucho más importante en esta que en cualquier otra posición. Sabiendo esto, vamos con mi ranking personal de los 5 mejores mariscales de campo de esta promoción.

1) C.J. STROUD (OHIO STATE)

En la época del highlight entiendo que CJ Stroud esté peor valorado por los aficionados que otros pasadores de esta camada pero, como ha demostrado su favoritismo en las apuestas para ser el pick #1 del Draft, creo que los equipos le tienen mucho mejor valorado.

Stroud hace muy bien las cosas aburridas que tiene que hacer un quarterback: es capaz de cambiar las protecciones de la línea ofensiva, es capaz de elegir correctamente la jugada en función de la defensa antes del snap y de diseccionar la defensa una vez ha recibido el balón. Tiene una gran anticipación y juega bien desde la bolsa de protección, no va a fallar pases fáciles y va a poner a sus receptores en disposición de ganar yardas tras la recepción. Además, CJ es un jugador móvil y rápido, capaz de ganar yardas por tierra.

Si bien es verdad que no ha jugado bien bajo presión su partido ante Georgia tapa todo. En él se mostró calmado, capaz de improvisar y de generar cuando la jugada está rota ante la mejor defensa de la última década en el fútbol americano universitario.

¿Su único “pero? La cantidad de talento a la que ha lanzado: Garrett Wilson, Chris Olave, Jaxon Smith-Ngjigba, Marvin Harrison Jr y Emeka Egbuka. Los dos primeros fueron primera ronda en 2022, el tercero lo será en 2023 y los siguientes parece que también cumplirán con la norma en el futuro. Encaminado como todo parece hacia Carolina su talento en el cuerpo de receptores caerá en picado.

2) ANTHONY RICHARDSON (FLORIDA)

Si hay que apostar por un talento a desarrollar este año yo apuesto por Anthony Richardson. Su poca experiencia, ha lanzado menos de 400 pases en su carrera y solo ha pasado para más de 280 yardas en dos partidos, pueden tener dos lecturas según en qué lado de la balanza estés con Richardson: o bien puedes pensar que nunca cogerías a un quarterback con tan poca experiencia o bien puedes pensar que aún tiene muchísimo que aprender.

La impresionante capacidad atlética de Richardson, que le convierte desde ya en uno de los cinco mejores quarterbacks corredores de la Liga, le va a dar un tiempo para desarrollarse y aprender sobre el campo que muchos otros novatos no tienen. Como a Jalen Hurts o a Justin Fields, esto le va a permitir sobrevivir en un emparrillado y mejorar en sus errores como pasador, que no son pocos.

Su 53,8% de completos esta temporada es alarmantemente bajo y aunque Richardson tiene un cañón por brazo, sus mecánicas son tremendamente inconsistentes y en sus partidos se puede pasar de un lanzamiento élite a uno que no haría ni un jugador de instituto. Mucho con lo que trabajar, sí, pero el riesgo merece la pena.

3) BRYCE YOUNG (ALABAMA)

Young es otro quarterback al que el proceso del Draft se le ha hecho largo. Tras ganar el trofeo Heisman en 2021, Young volvió a brillar en Alabama en 2022, pero para todos los fans ávidos de un nuevo héroe al que coronar nada más de lo que pudiese hacer era nunca suficiente.

Young gana desde la tranquilidad que desprenden todas sus acciones. Danza dentro de la bolsa de protección con una habilidad pasmosa y parece que no le molesta la presión. Su madurez en el emparrillado es, también, de otra galaxia. Conoce el pase que quiere lanzar, mueve a sus rivales con los ojos y sus lanzamientos son fuertes y precisos. Es un jugador al que tienes que llevar al límite para que cometa un error.

Su escasa altura y su poco peso harán saltar las alarmas de muchas franquicias. Las más de 200 libras que pesó en la Combine son totalmente artificiales y ser más bajito que Kyler Murray no ayudará. Pero en el Draft de la NFL hay un dicho que es realidad: “para ser el pick #1 no te hace falta enamorar a todos los equipos, solo al que elige primero”. Y Bryce Young podrá generar dudas en muchas gerencias, pero estoy convencido que tiene a otras tantas totalmente enamoradas de su juego.

4) WILL LEVIS (KENTUCKY)

Al bueno de Will Levis le podemos ayudar con un montón de excusas a su mediocre juego en 2022: fue el quarterback peor rodeado de toda la camada, sufrió una lesión en el hombro de lanzar que lastró su campaña… Y aunque bien podrían ser ciertas, los fríos números nos dicen algo: Levis tuvo que salir de Penn State porque no fue capaz de arrebatarle el puesto a un Sean Clifford que no va a jugar nunca en la NFL, ha lanzado 23 intercepciones en sus dos temporadas en Kentucky y durante sus cinco años de carrera universitaria solo ha tenido un año bueno, donde lanzó 24 touchdowns y 13 intercepciones.

Entre sus virtudes está que es un

quarterback prototipo en cuanto a altura y peso se refiere y, además, posee un gran brazo con el que hacer todo tipo de lanzamientos NFL. Va a aportar como corredor, ya que, aunque no es muy elusivo, sí que es capaz de bajar la cabeza y conseguir cuatro o cinco yardas cuando es necesario.

De todas maneras, el mantra de “encontrar al nuevo Josh Allen” lleva un par de años confundiendo a muchos equipos. No se puede “econtrar al nuevo Josh Allen” porque es tremendamente improbable que otro jugador consiga lo que ha conseguido Josh Allen. El camino de pasar de ser un proyecto con más bajos que altos en tu etapa universitaria a un candidato perenne por el MVP no está al alcance de todos. Y creo que LeVis es otro que se quedará en el camino.

5) HENDON HOOKER (TENNESEE)

Es más mayor que Jalen Hurts o Justin Herbert, se rompió el ligamento cruzado en noviembre y ha jugado en un ataque de Josh Heupel que no tiene nada de similar a lo que puede ser un ataque NFL. Vaya manera de empezar un párrafo donde intento exponer que es el quinto mejor pasador de esta clase…

La realidad es que en una camada con mucha diferencia entre los cuatro primeros quarterbacks (que probablemente saldrán en primera ronda) y el resto. Hendon Hooker se alza como el jugador más seguro de “los otros”. Hasta su lesión en noviembre venía siendo el mejor pasador del año y la progresión que ha mostrado desde sus primeros años en Virginia Tech hasta ahora era asombrosa.

En una ofensiva no huddle y con mucho pase profundo, Hooker era el rey. Su precisión en pases que vuelan más allá de las 20 yardas es espectacular y aunque no es el mejor corredor del mundo, las defensas rivales tienen que respetarle en el aspecto terrestre. Las incógnitas sobre él no son pocas, pero me extrañaría no ver a Hooker saliendo en los 60 primeros picks.