Durante la última década el juego ofensivo en la NFL no ha hecho más que crecer y mejorar a pasos agigantados. En muchas ocasiones incluso arrasando a las defensas a su paso y con la sensación que, en esta carrera de armamento constante que es la mejor liga del mundo, los ataques evolucionaban mucho más rápido de lo que lo hacían las defensas.
Ayudados también por las grandes ventajas que suponían la implementación de algunas reglas en la Liga la última gran defensa que consiguió llevar a un ataque totalmente inoperante a ganar una Super Bowl fue la defensa de los Broncos de la temporada 2015. Sin embargo, y cuando nos vamos al otro extremo, los ataques que han revolucionado la NFL prácticamente cada temporada se cuentan por decenas.
Los Panthers de Cam Newton, los Falcons de Shanahan y Matt Ryan, los Chiefs de Mahomes o los Rams de McVay solo son algunos ejemplos. Pero, ¿y este año? ¿Hay algún ataque que esté cambiando la manera de jugar en la NFL? ¿Hay alguna ofensiva a prueba de bombas?
Las sensaciones y los nombres dicen que no. De los 10 mejores ataques ahora mismo en la NFL en cuanto a efectividad en EPA/jugada a todos se les puede sacar alguna falla. El 10º mejor ataque son los San Francisco 49ers, que no han encontrado aún la solución sobre quién debería ser su quarterback titular durante la temporada viendo el desempeño de Brock Purdy. El 9º son los Chicago Bears, donde Caleb Williams sigue levantando dudas… y recibiendo una gran cantidad de sacks.
En el puesto número ocho están los Lions, con seguramente la peor línea ofensiva desde que Dan Campbell es entrenador. Hasta ha tenido que volver del retiro su antiguo center Frank Ragnow. ¿Los Patriots? Son el 7º mejor ataque, pero más allá de un par de jugadas explosivas de Treveyon Henderson tampoco tienen un ataque de carrera diferencial.
Dallas, con la posición número 6 podría ser el ataque más completo: buena línea ofensiva, un quarterback jugando a un nivel de MVP… pero con cómo está funcionando la defensa de mal el estrés que sufre ese ataque es tremendo. Y llegamos para el que para mi es el mejor ataque de la NFL: Los Ángeles Rams. Y que están a una lesión de su quarterback de 37 años de irse al garete.
Los Bills se encuentran en la posición número 4 con una falta alarmante de receptores competentes. Los Packers se llevan la medalla de bronce con un Love con muchos problemas para ser consistente. La segunda posición del ranking es para los Chiefs, que solo han superado los 32 puntos en una ocasión esta temporada. Y el número 1 es para los Colts, con un Daniel Jones inestable y en el que la carroza se está empezando a convertir en calabaza.
¿Y si lo comparamos con la temporada pasada? No es solo sensación mía y vuestra que el año pasado hubiese tres ataques mejores que el mejor ataque de este año. Los Ravens eran una absoluta apisonadora con un Lamar Jackson haciendo una temporada que le podría haber valido el MVP y un Derrick Henry histórico mientras que los Bills fueron uno de los ataques más explosivos de la NFL con un Josh Allen que, de hecho, se llevó el MVP con unos números históricos.
Incluso los Detroit Lions eran un equipo más completo y a prueba de bombas en ataque de lo que son los Colts este año. Con Goff manejando un cuerpo de receptores de élite a la perfección y una línea ofensiva que asfaltaba carreteras para un duo de corredores sin comparación alrededor de la Liga.
Los números lo respaldan también. Tanto Baltimore Ravens como Buffalo Bills superaron en efectividad a los Colts de esta temporada a lo largo de los 17 partidos del año pasado. Y como es normal que los números de los Colts se vayan normalizando según avance el año, lo más probable es que los Detroit Lions también superen a los Colts.
¿Es solo sensación mía? ¿O este año no hay ningún ataque mejor que los que teníamos en la NFL el año pasado?