Cuando nos encontramos al inicio de cualquier espectĂĄculo, lo que queremos es disfrutar del contenido durante el tiempo que dura la funciĂłn y, ademĂĄs, deseamos que el final sea sublime, que nos sorprenda y que nos deje con la boca abierta. Y si puede ser, que nos obligue a quedarnos con la sensaciĂłn de querer todavĂa mĂĄs. Este 11 de febrero, en Las Vegas, vamos a tener todo eso y mĂĄs. O, al menos, es lo que cada aficionado a este deporte desea. Los Kansas City Chiefs, actual campeĂłn, se enfrentarĂĄ al que era, posiblemente, mĂĄximo favorito de la Conferencia Nacional en casi todas las quinielas allĂĄ por el mes de septiembre: los San Francisco 49ers. Muchas cosas han cambiado durante estos meses para ambos conjuntos, pero llegan preparados para lo que se les viene encima. Por mi parte, os dejo con la Ășltima previa de la temporada. La que mĂĄs me gusta hacer: la previa del gran partido.
CUANDO LOS CHIEFS TENGAN EL BALĂN
Nadie esperaba una temporada regular donde el equipo de Andy Reid sufriese tanto con su ofensiva. Es cierto que la pĂ©rdida de talento ha ido aumentando con el paso de los años, pero estĂĄbamos acostumbrados a que Patrick Mahomes sacase de la chistera una manada de conejos en cada situaciĂłn complicada, o que el propio head coach se inventase jugadas inverosĂmiles para darle herramientas a su quarterback. Todo eso pareciĂł esfumarse entre los meses de octubre y diciembre. Sin embargo, cuando llegaron los playoffs, en el momento que mĂĄs lo necesitaban, la magia volviĂł a aparecer.
Los Chiefs han demostrado una adaptaciĂłn fuera de lo comĂșn a lo que su rival propone. Desde la sala de video, Andy Reid ha ido localizando defectos en sus oponentes y los ha sabido plasmar en el terreno de juego. Al menos, lo han podido exprimir lo suficiente para que el ataque sea productivo y pueda poner los puntos en el marcador necesarios para conseguir el objetivo. Para ello, hay dos aspectos que me parecen clave a estas alturas de temporada: las formaciones pesadas con varios light ends y el uso de Isaiah Pacheco, algo que puede ser importante cuando de enfrentarse a los San Francisco 49ers se refiere.
Durante todo el curso, Steve Wilks, coordinador defensivo de los mineros, ha propuesto defensas algo ligeras, ya que los Niners es el cuarto equipo que mĂĄs veces juega con formaciones "nickel" (cinco defensive backs). Con estos nĂșmeros, lo normal es verlos sufrir contra el juego terrestre como hemos visto en sus dos partidos de playoffs frente a Packers y Lions. Cuando el rival localiza este tipo de formaciones, la ventaja numĂ©rica en la caja, con formaciones mĂĄs pesadas, hace que puedan avanzar con relativa facilidad. Los Chiefs han encontrado un filĂłn con sus formaciones de dos y tres tight ends. Esto les ayuda a bloquear para la carrera y, ademĂĄs, libera a Travis Kelce en el juego de pase frente a jugadores mĂĄs pesados que Ă©l, lo que hace que se convierta en una ventaja por todo el campo.

En la imagen de arriba, podĂ©is ver una situaciĂłn de carrera con tres tight ends en la formaciĂłn (personal 13, un running back y tres tight ends). Antes del snap, Bell y Gray forman en el lado derecho de la linea ofensiva, y Travis Kelce lo hace en el izquierdo. Bell inicia su motion para cambiar de lado y, una vez que Mahomes tiene el balĂłn en las manos, bloquea al defensor que queda sin asignaciĂłn por parte de la linea ofensiva. A su vez, Kelce sube al segundo nivel para bloquear a uno de los dos linebackers, mientras que el guardia derecho hace lo propio con el otro defensor de esa zona media. Los bloqueos se suceden mientras Pacheco persigue al guard derecho, leyendo el espacio que se abre en la lĂnea y colĂĄndose por una rendija bastante pequeña, mostrando ser muy efectivo para alcanzar el segundo nivel y seguir corriendo hasta conseguir el primer down.
Pero si nos vamos a la verdadera amenaza de los chicos de Andy Reid, no podemos dejar de hablar de Travis Kelce. Al igual que toda la unidad ofensiva, Kelce no ha tenido su mejor temporada regular, pero ha explotado en el momento mås importante del curso. Es evidente que los rivales han centrado sus esfuerzos en frenar la productividad del tight end y, durante gran parte del año, lo han conseguido. Con todo eso en contra, Reid ha encontrado la manera, una vez mås, de darle espacios a su mejor receptor.

Una de las formas mĂĄs habituales para ello es la utilizaciĂłn de "bunch formations". Con esta formaciĂłn, Reid le da a Kelce espacio en el inicio de la ruta para que pueda aprovechar luego su route-running y su fĂsico para generar la ventaja. En la imagen de arriba, podĂ©is ver este tipo de formaciĂłn con mĂĄs de un tight end en el campo (cĂrculos amarillos). Cuando se inicia el snap, Kelce tiene espacio para ganar velocidad frente a su defensor en individual. AdemĂĄs, la ruta vertical de Watson genera trĂĄfico y hace que Hamilton se desequilibre, dandole aĂșn mas terreno para que Kelce juegue el corte al exterior y sea un objetivo claro para Mahomes. No voy a sorprender a nadie si digo que la conexiĂłn Mahomes-Kelce ya es histĂłrica. Desde 2018, durante los playoffs, el quarterback de los Chiefs promedia 139.2 en rating de pase cuando lanza al tight end. Su porcentaje de completos en esta situaciĂłn es del 80.9%, con 1.472 yardas, 17 touchdowns y solo una intercepciĂłn. En esta temporada regular de 2023, los nĂșmeros del duo Mahomes-Kelce eran de 76.9% en pases completados, con 8.2 yardas de pase por intento, ademĂĄs de cinco touchdowns, dos intercepciones y un rating de 107.1. En sus tres partidos de playoffs, todas esas estadĂsticas han subido de una manera excepcional: 85.2% en completados, 9.7 yardas de pase por intento, tres touchdowns, cero intercepciones y un rating de 144.1.
Con todo esto, podemos tener claro que una de las claves para la defensa de los 49ers serĂĄ cerrar espacios en zonas medias al tight end de los Chiefs. En esta temporada, Kelce lidera la liga en recepciones en el tercer medio del campo defensivo (zonas hook) con 55 atrapadas. En playoffs, ha conseguido ocho recepciones para 83 yardas. Sin embargo, la defensa minera suele defender muy bien esos huecos, siendo el equipo que menos rating de pase permite con un 68.0, y lo hace, sobre todo, con dos hombres que serĂĄn bĂĄsicos, una vez mĂĄs, en esta Super Bowl.
Fred Warner y Dre Greenlaw estĂĄn teniendo muchĂsimo trabajo en los playoffs. La lĂnea defensiva no estĂĄ siendo todo lo diferencial que deberĂa ser por los grandes nombres que la componen, y eso repercute en los dos jugadores que estĂĄn alineados detrĂĄs de ellos. Cuando los Niners forman con dos safeties en la zona profunda, dejan la caja algo dĂ©bil, permitiendo a los lĂneas ofensivos rivales alcanzar el segundo nivel con facilidad y bloquear a estos dos linebackers. Ambos son excelentes en la lectura del juego y en el rango lado a lado, pero no siempre pueden llegar a todo. La baja por lesiĂłn de Hufanga a mitad de temporada fue una pĂ©rdida muy importante, ya que el safety facilitaba mucho el trabajo de sus compañeros en esa zona del campo. Ahora, Warner y Greenlaw se tienen que multiplicar en labores contra la carrera, contra el pase e incluso en el pass-rush.
Con la marcha de DeMeco Ryans y la llegada de Steve Wilks, los 49ers han perdido valor en su pass-rush. En los años anteriores, veĂamos mucha productividad con los cuatro defensores del frente y la sorpresa del blitz aumentaba aĂșn mĂĄs la capacidad de presionar al quarterback rival. Esta temporada regular, los 49ers han sido el tercer equipo con menos ratio de blitz, pero esto ha tenido que cambiar en playoffs. La poca eficacia del pass-rush en los dos partidos de post temporada, ha obligado a su coordinador defensivo a ser mucho mĂĄs agresivo en situaciones dĂłnde antes no veĂamos esos esquemas.

En la imagen de arriba, podĂ©is ver un ejemplo de lo que os estoy contando. San Francisco muestra dos safeties en su zona profunda antes del snap, y alinea a Fred Warner en la lĂnea de scrimmage amenazando el blitz, junto a Lenoir por el exterior. Cuando se inicia la jugada, Warner cae a la zona media, Lenoir presiona al quarterback por fuera y uno de los safeties se queda en individual con el receptor alineado en la cara de Lenoir. A su vez, Nick Bosa juega un stunt para tapar el pase al medio mientras Warner cierra la ruta cruzada, la cual podĂa ser la vĂĄlvula de escape del quarterback ante la presiĂłn. Con eso fuera de la ecuaciĂłn, los hombres de la lĂnea defensiva tienen tiempo para cerrar espacios y cazar al pasador.
Cuando juegas contra Patrick Mahomes, tienes que cuidar mucho esas rutas cortas y no permitir lecturas sencillas antes y después del snap, porque no te perdona. Con los Niners siendo una defensa muy orientada a coberturas zonales, cualquier snap dónde Mahomes tenga tiempo de pensar en el pocket, las probabilidades de ver receptores abiertos serån bastantes altas. Si los Chiefs dominan desde las trincheras con su ataque, el partido se le puede hacer muy largo a la defensa minera, ya que si algo saben hacer los Chiefs es jugar drives largos y sostenidos, convirtiendo el encuentro en un golpeo constante al corazón de su rival, hasta dejarlo sin aliento y sin esperanzas.
CUANDO LOS 49ERS TENGAN EL BALĂN
Cuando miras la plantilla de los San Francisco 49ers, te das cuenta de la cantidad de talento diferencial que le puede amargar la noche a cualquier rival. Sin embargo, y al final del dĂa, todo estĂĄ en la capacidad de Kyle Shanahan para generar juego desde la banda. En estos playoffs, hemos visto sufrir mucho a un ataque muy sĂłlido durante toda la temporada regular. La baja de Deebo Samuel en la Ronda Divisional frente a los Packers provocĂł desajustes en una ofensiva que nota muchĂsimo la falta del wide receiver. Frente a los Lions, Brock Purdy tuvo que salirse varias veces de la estructura de la jugada para poder producir primeros downs y seguir moviendo cadenas, algo que no solemos ver con asiduidad en un ataque muy orgĂĄnico y milimĂ©tricamente controlado, algo que necesitas sĂ o sĂ cuando de enfrentarse a la defensa de Steve Spagnuolo se trata. La defensa de los Chiefs se ha convertido en el mayor valor del equipo. Spagnuolo vuelve locos a los quarterbacks con sus rotaciones defensivas en la zona profunda y con sus esquemas de blitz en el frente. El pass-rush suele funcionar tanto por una cosa como por la otra y el agobio constante al pasador genera pĂ©rdidas de balĂłn que su ataque no suele perdonar. Para este duelo, el diferencial de turnovers puede desnivelar la balanza para el lado que salga en positivo. Spagnuolo guerra buscar los errores y precipitaciĂłn de Purdy, algo que ya se lo hemos visto hacer en estos playoffs.

Arriba tenéis uno de estos esquemas para provocar pérdida de yardas en el rival. Antes del snap, los Ravens mueven a un receptor de lado a lado, y la defensa de los Chiefs responde con un cornerback viajando con ese receptor, lo que le da al quarterbcak la idea de defensa individual con dos safeties en la zona profunda. Cuando se inicia la jugada, Justin Reid abandona su asignación individual y entra al blitz, siendo el safety de detrås de él quien se encarga de su receptor. El blitz funciona a la perfección y Jackson no tiene tiempo para poder soltar el ovoide.
Los Chiefs son el quinto equipo que mĂĄs veces va en blitz de toda la liga. Son muy agresivos atacando al quarterback con situaciones dĂłnde podemos ver hasta seis o siete defensores entrando al pass-rush. AdemĂĄs, esta agresividad tambiĂ©n conlleva un alto nĂșmero de snaps con defensas individuales. AquĂ, brilla su mejor cornerback, un L'Jarius Sneed que ha dejado una temporada sensacional siendo gran culpable del Ă©xito cosechado por esta defensa. Su 'fisicalidad' al enfrentarse a los mejores wide receivers del rival permite a su defensa arriesgar mucho mĂĄs de la cuenta. Sneed permite, en esta temporada, un porcentaje de completados de solo el 49% cuando Ă©l es el objetivo del quarterback rival, dejando el rating de pase a esos QBs en un pobrĂsimo 60.1. Para esta Super Bowl, su duelo frente a Deebo Samuel serĂĄ uno de los factores determinantes en el resultado final.
Los que siguen estas previas, ya saben de mi debilidad por el wide receiver de los San Francisco 49ers. Para mĂ, Samuel es el que abre todo el abanico tĂĄctico a Kyle Shanahan. Con Ă©l en el campo, las prestaciones de esa ofensiva suben exponencialmente. Vemos a Deebo alineado en el exterior, en el slot o en el backfield, pero rara vez su finalidad es la de correr una "simple" ruta. Los motions antes del snap, movimientos despuĂ©s del inicio de jugada para recoger el balĂłn de las manos de su quarterback o las salidas desde el pocket para correr o jugar al pase, hacen que las defensas sufran una barbaridad. Y mĂĄs si le acompaña Christian McCaffrey en el campo. AhĂ, Shanahan puede jugar con la defensa para que una mala lectura o un paso en falso genere mucho espacio para los lanzamientos de Brock Purdy.
Con Deebo Samuel, ademĂĄs, el juego de "screens" es una amenaza constante. Shanahan busca continuamente las ventajas numĂ©ricas en el exterior para que el wide receiver gane yardas despuĂ©s de la recepciĂłn mientras sus compañeros bloquean campo abajo. El 'atleticismo' de sus lĂneas ofensivos, tambiĂ©n son parte importante en este tipo de esquemas, y los vemos saliendo de la lĂnea de scrimmage con mucho peligro en el segundo nivel, algo en lo que destaca bastante alguien como Trent Williams.

Como podéis ver en la imagen de arriba, Deebo alinea en el backfield y es McCaffrey quien esta en el slot. Antes de iniciarse la jugada, el running back cambia de lado y, cuando Purdy tiene el balón en sus manos, McCaffrey, Aiyuk y Jennings se encuentran iniciando el bloqueo para la jugada de "screen" a Deebo Samuel. Una vez que Samuel ha recibido el pase, tiene delante de él mucho campo y suficientes bloqueos como para ganar el primer down y mucho mås.
Es evidente que Kyle Shanahan va a querer que Purdy suelte el pase lo mĂĄs rĂĄpido posible, ya que esta es una de las maneras de evitar el pass-rush de los Chiefs. La linea ofensiva de los Niners ha sufrido bastante en sus Ășltimos encuentros, y el lado derecho puede presentar un problema si el quarterback requiere de un par de segundos mĂĄs en el pocket cuando necesiten rutas mĂĄs profundas. George Karlaftis es el jugador que mejor estĂĄ aprovechando los dobles bloqueos que suele recibir Chris Jones, y su enfrentamiento contra Colton McKivitz es muy favorable para el defensor de Chiefs. Ya vimos cĂłmo, en el duelo frente a los Lions, George Kittle tuvo que quedarse en bastantes ocasiones ayudando a su tackle derecho cuando Aidan Hutchinson alineaba en ese lado de la lĂnea. Si la OL minera aguanta, el peligro para el equipo de Andy Reid se llamarĂĄ Brandon Aiyuk.
Aiyuk ha ido ganando cada vez mĂĄs peso en la ofensiva de Shanahan, hasta el punto de que, cuando mĂĄs calienta el balĂłn en el juego de pase, Ă©l es el primer objetivo de Brock Purdy. Aiyuk lidera la liga con 17.8 yardas por recepciĂłn y sus 1.342 yardas de recepciĂłn en la temporada regular lo colocan como el Ășnico wide receiver de la franquicia minera en sumar ese nĂșmero de yardas y alcanzar la Super Bowl en el mismo curso. El otro que lo ha hecho es un tal Jerry Rice, que a buen seguro os suena a todos. SerĂĄ muy interesante ver como Spagnuolo alinea a sus cornerbacks con los receptores mineros. Antes os nombraba la posibilidad de ver a Sneed con Samuel, pero es bastante probable que tambiĂ©n quiera emparejarlo con Aiyuk en situaciones de terceros downs largos. En el curso pasado, cuando los Chiefs viajaron a Santa Clara para enfrentarse a los 49ers, Sneed estuvo asignado con Aiyuk nueve snaps, dejando al WR minero en una sola recepciĂłn para trece yardas. Ese dĂa, tambiĂ©n estuvo emparejado con Deebo Samuel en ocho ocasiones, dejĂĄndolo en dos recepciones para10 yardas totales cuando se vieron las cara uno contra el otro.
Muchos tambiĂ©n pondrĂĄn en perspectiva al "Mr. Irrelevant" de 2022. Brock Purdy polariza mucho la opiniĂłn sobre Ă©l, y como casi siempre pasa en estos casos, es algo que no preocupa ni al jugador ni a sus compañeros ni al entrenador. Purdy ha demostrado ser lo suficientemente buen lĂder como para reaccionar en los momentos mĂĄs importantes que han vivido los 49ers en los actuales playoffs. Ese carĂĄcter competitivo, y el acierto en las situaciones mĂĄs delicadas, hacen de Ă©l el hombre a confiar, algo que estos mismos Niners echaron de menos hace cuatro años, cuando en un Ășltimo cuarto para olvidar, Jimmy Garoppolo fue incapaz de completar los pases necesarios para darle la vuelta a ese partido frente a los Chiefs. Purdy tendrĂĄ una difĂcil papeleta este domingo, y tendrĂĄ que cuidar mucho el balĂłn cuando quiera buscar a sus receptores a la espalda de los linebackers, algo que Shanahan sabe explotar a las mil maravillas.
Estamos en Las Vegas y ambos equipos querrĂĄn apostar fuerte para llevarse el mejor botĂn que pueda haber en cualquiera de los casinos de la ciudad. El trofeo Vince Lombardi espera para quiĂ©n mejor juegue sus cartas y para el que tenga la cabeza frĂa cuando la presiĂłn mĂĄs apriete. Nos queda un solo partido para que acabe la temporada de 2023, por lo que vamos a disfrutarlo al mĂĄximo de principio a fin, desde el primer cuarto hasta el Ășltimo. El campeĂłn contra un aspirante sublime. El mejor jugador del planeta tierra, Patrick Mahomes, contra la historia mĂĄs bonita de la actual NFL, Brock Purdy. En 2019, los Kansas City Chiefs salieron triunfadores, y el destino ha querido regalarle a Kyle Shanahan una perfecta venganza en la Ciudad del Juego.
Hagan sus apuestas y que gane el mejor.




