Cumplido el primer mes de competencia en la NFL, ya tenemos una muestra sobre determinados tópicos. Debido al énfasis defensivo en cubrir las profundidades del terreno (hasta se han vuelto a ver formaciones tipo Cover 2), los equipos buscan nuevas maneras de seguir siendo productivos, llegando incluso a encontrar otras vías que conduzcan a los pases largos.
El backfield es más valioso

En las cuatro primeras semanas se ha visto como el backfield está adquiriendo otra dimensión. Hay equipos que le dan mucha utilidad, ya sea para colocar a sus corredores en posición de atrapar pases, para hacer motions que ayuden a crear espacios o simplemente, para distraer y poder generar duelos de uno contra uno.
Otro equipo que recurre al backfield es el campeón, Kansas City Chiefs. Aunque su utilidad es muy particular, debido a que jugadores como Isiah Pacheco o Jerick McKinnon contribuyen, en primer lugar, para quitarle presión a Patrick Mahomes. Aunque sus características encajan muy bien dentro del esquema de Andy Reid, tanto por tierra como por aire, explotando los espacios que dejan las defensivas, enfocadas en cubrir los pases largos.
La eficiencia de los pasadores

Ante las actuales tendencias, los quarterbacks han tenido que adaptarse a jugar drives más extendidos. Esta modalidad obliga a que los mariscales de campo tengan que leer mucho más a las defensivas rivales, lo que implica muchas veces tener que acudir a una segunda o tercera opción de pase.
Los mencionados Chiefs y Dolphins son conocidos por aquello. Desde el año pasado, Mahomes juega con más paciencia y buscando la opción más segura. El caso de los 'Fins puede ser más llamativo, debido a que Tua Tagovailoa se establece jugando de forma más rápida y muchas veces lanzando en primera lectura. El esquema bajo el que está inserto le ayuda a adquirir mayor puntería, además de una adecuada protección de sus linieros.
Después de su caótico estreno, los Buffalo Bills han ganado tres partidos consecutivos, en buena parte por jugar un football mucho más eficiente. Josh Allen está decidiendo más rápido dentro del pocket, lanzando el balón en primera o segunda lectura. Tiros rápidos para mover las cadenas y según el caso, que sea el receptor quien pueda correr más yardas, como bien lo hizo Stefon Diggs el domingo pasado.
En esta misma línea de lectura y precisión también entran Lamar Jackson y Brock Purdy. El caso de Jackson quizás no sea tan novedoso, aunque no deja de impresionar verlo jugar muy plantado dentro del pocket y hasta tomándose tiempo para ver el perímetro y encontrar la mejor opción disponible. Así es como logra conectar con Zay Flowers y sobre todo, con Mark Andrews. En cuanto a Purdy, es muy interesante verlo consolidarse como titular en los San Francisco 49ers. Cuando debe hacer jugadas importantes, está resolviendo con rapidez y sobre todo, mucha inteligencia.
Los aciertos de los coaches

Por otra parte, se puede apreciar como los entrenadores están creando situaciones para encontrar grandes jugadas. Hay equipos que están sacando formaciones con tres receptores agrupados en un sector de la cancha, cuyo objetivo es esparcirse e idealmente dejar a un jugador en situación de uno contra uno o derechamente desmarcado para hacer una recepción que acabe en touchdown.
Situaciones así benefician a jugadores como Brandon Aiyuk, quien suele ganar mucho terreno ante dobles marcas sobre George Kittle y Deebo Samuel. De igual manera, A.J. Brown y Devonta Smith están anotando mediante pases largos, en unos Philadelphia Eagles que dentro del abanico de opciones que entrega el Run-Pass Option, encuentran maneras de aislar a sus receptores, para que logren sus big plays.
Justin Jefferson también logra jugadas espectaculares, algunas de ellas filtrándose por la zona descubierta entre linebackers y safeties. Y a nivel colectivo, los Detroit Lions impresionan sacando jugadas en las que receptores como Kalif Raymond y Amon-Ra St. Brown logran quedar abiertos, tal como lo hicieron la semana pasada ante los Green Bay Packers, donde con sus desmarques lograron marcar la diferencia.
El año pasado se conocieron los ajustes defensivos. En lo que llevamos de esta temporada, no solo vemos a las ofensivas responder, sino que estamos presenciando un nivel de creatividad que nos está dejando una amplitud de tácticas, jugadas y por supuesto, grandes desempeños. Evolución, desde el playbook hasta la cancha, con la precisión y velocidad de los grandes talentos ofensivos.